Tiene 6.000 metros cuadrados, tres pisos, una oferta de lo más variada y está abierto las 24 horas del día.
Estas son algunas de las características del restaurante más grande de McDonald’s.
El establecimiento, que se asemeja más a un centro comercial que a un restaurante, se encuentra en la ciudad de Orlando, se inauguró en 1976 y la compañía lo renovó hace apenas 6 años para convertirlo en su buque insignia.
Además, en su interior, tiene rasgos distintivos que hacen de este un espacio totalmente diferente a todos los que el gigante estadounidense de comida rápida tiene repartidos por el mundo. Así lo muestran varios bloggers, streamers y youtubers que no han podido resistirse a la tentación de comprobar de primera mano las virtudes de Epic McD, así es como se llama.
Un Ronald McDonald de unos 8 o 9 metros recibe a los clientes en la puerta y este se ilumina por las noches haciéndose visible a kilómetros de distancia. Ya en la entrada aparece un acuario de grandes dimensiones, algo inédito en un local de la cadena.
La primera planta cuenta con un área para postres y con una cocina con horno de leña. Dos espacios preparados para elaborar dulces, tartas y pizzas. Sí, pizzas en un McDonald’s. Pero no solo pizzas, sino también platos de pasta, como si de un restaurante italiano se tratara.
Las estancias superiores del local disponen de un auténtico paraíso para los más pequeños, ya que esconden decenas de máquinas recreativas con los últimos videojuegos del mercado, una bolera con dos carriles y una zona con inflables y toboganes de más de seis metros de altura.
A pesar de contar con estas características tan especiales y de haberse convertido en toda una atracción casi turística, hay mucha gente que no conoce este templo de McDonald’s. Y así lo reflejan algunos comentarios que muchos de los adeptos de la cadena han plasmado en las redes sociales mostrándose sorprendidos por las características del mismo.
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