El Valle Sagrado de los Incas no solo ofrece historia y cultura, sino también invita a vivir intensas experiencias de aventura. Descubre cuatro actividades de alto voltaje que te harán sentir vivo en medio de paisajes espectaculares.

Bogotá, julio de 2025- El Valle Sagrado de los Incas es un lugar tan místico como majestuoso. Quien lo visita siente el poder de las montañas andinas y se rinde ante su profunda belleza. Este increíble destino ofrece algunas de las mejores vistas de Cusco y brinda alternativas que van desde visitar sitios arqueológicos y convivir con comunidades locales, hasta vivir experiencias llenas de adrenalina en conexión permanente con la naturaleza.
Para experimentar la emoción al aire libre y explorar paisajes que roban el aliento, recomendamos cuatro actividades imperdibles que se pueden realizar en este mágico lugar, que se encuentra a una hora y media de la ciudad del Cusco.

Ciclismo y paisajes incomparables en Maras
Una gran opción para los amantes de la aventura, es recorrer la localidad de Maras en bicicleta y maravillarse con su paisaje andino lleno de montañas y un hermoso cielo azul. Se pueden elegir diversas rutas con diferentes grados de dificultad que permiten recorrer senderos que están a 3,300 metros sobre el nivel del mar. La más sencilla —un trayecto corto para adaptarse a la altura— va desde la zona conocida como Ramal de Maras (un desvió de la vía principal del Valle Sagrado) al pueblo de Maras, donde se puede apreciar la iglesia de San Francisco, construida sobre un adoratorio inca, y sus portadas con relieves hechos de piedra.

La segunda ruta, de 8 km de distancia, llega hasta la Salineras de Maras, un espectáculo visual y cultural de más de 3.000 pozos formados por un proceso natural que da origen a la cotizada sal del lugar. El trayecto más largo es de 13 km y conduce a las enigmáticas terrazas circulares de Moray, un centro de experimentación agrícola inca en el que cada círculo concéntrico posee un microclima para el cultivo de especies locales. Se recomienda realizar esta aventura con una empresa de turismo autorizada que brinde los equipos necesarios y un guía que acompañe en esta experiencia fascinante que jamás olvidarán.
Kayak y stand up paddle en Piuray
Otra gran opción que ofrece Cusco es conectar de forma profunda con la naturaleza en las aguas tranquilas de la laguna de Piuray. En este lugar, que está rodeado de montañas con andenes y encantadores poblados, se puede admirar la belleza paisajística y sentir la paz que regala este lugar mientras se está a bordo de un kayak o sobre una tabla de paddle surf. El reflejo de las nubes y de las montañas sobre la laguna en medio de un entorno hipnótico, permiten vivir esta experiencia de una manera única.

Las empresas de turismo que ofrecen estas actividades, brindan los equipos necesarios y también dan una inducción al visitante. Además, tras realizar kayak o stand up paddle, se puede completar la experiencia con una clase de cocina o clases de yoga a los pies de la laguna de Piuray y su maravilloso entorno natural.
Canopy en medio de los Andes
Nada como experimentar la sensación de ver el Valle Sagrado de los Incas desde otra perspectiva, sintiendo el viento en el rostro y viajando a toda velocidad por un cable. El canopy, tirolesa o zipline es una práctica que también se puede realizar en esta zona privilegiada del Cusco. Sus opciones combinan vistas panorámicas, que permiten admirar desde lo alto los ríos y montañas de los Andes con una dosis de adrenalina pura.

Hay opciones para deslizarse por un solo cable hasta circuitos que permiten cruzar un entramado de modernas líneas que suman más de 2,000 metros de recorrido aéreo. Las empresas que ofrecen esta actividad brindan los equipos y explicación necesaria para realizar esta actividad sin inconvenientes. Una opción que permitirá a los aventureros ver el paisaje desde la perspectiva de un cóndor.
Vía ferrata: adrenalina al máximo
Esta escalada con vistas de infarto es una opción para los más audaces. La vía ferrata de Ollantaytambo combina el senderismo de montaña y la escalada. Tras equiparse con arneses, casco y guantes, se asciende por paredes rocosas con escalones y puentes colgantes hasta llegar a los 300 metros de altura.

La subida de vértigo se realiza mediante escaleras desplegables y cuenta con el apoyo de cables fijos para garantizar la seguridad. El itinerario suele culminar con un descenso en rápel de 100 metros y la recompensa de contemplar la belleza paisajística andina desde miradores naturales con vistas al valle.
Conectividad
Ubicado a solo tres horas de vuelo desde Bogotá y tres horas y media desde Medellín o Cartagena, Perú es el destino ideal tanto para escapadas cortas como para vacaciones largas.
Para llegar a Cusco, se puede tomar alguno de los 95 vuelos semanales que conectan estas tres ciudades colombianas con Lima, la capital peruana, y de ahí tomar un vuelo a Cusco; o se puede tomar uno de los 7 vuelos directos que hay desde Bogotá a Cusco.