Fiduoccidente, filial del Banco de Occidente, lanza una nueva herramienta que permite a la fuerza de ventas de las constructoras realizar el proceso de vinculación y adhesión a un proyecto de forma 100% digital. De esta manera, los compradores no necesitan entregar documentos físicos o digitalizados para el proceso, ya que la validación de identidad y de documentación financiera se lleva a cabo en línea, a través de fuentes externas, brindando mayor confianza para los proyectos inmobiliarios. Asimismo, a través de la nueva funcionalidad se podrán vincular hasta cuatro compradores por unidad inmobiliaria en máximo 20 minutos, lo que optimiza los tiempos de actividades operativas y facilita la comercialización de los proyectos.
El desarrollo del sector inmobiliario resulta fundamental, pues cerró 2021 con una cifra récord de 240.000 viviendas nuevas vendidas, lo que representó un aumento del 17% con respecto a 2020. Asimismo, al cierre de febrero de este año, Fiduoccidente ya se encontraba administrando $1,09 billones en negocios inmobiliarios, lo que da cuenta del impulso que podría tener en 2022.
Con la nueva herramienta el futuro adquiriente de un inmueble no tiene necesidad de firmar documentos, dado que este proceso también se realiza de forma completamente digital. Para lograrlo, Fiduoccidente ha desarrollado un formato de vinculación digital que cumple con todas las disposiciones legales requeridas y tiene el mismo valor y eficacia probatoria que uno firmado en físico. Este avance resulta, además de práctico, amigable con el medio ambiente por la reducción de papel.
Al respecto, Mario Estupiñán, presidente de Fiduciaria de Occidente, menciona “Esta nueva funcionalidad ratifica el compromiso que tenemos de mejorar la experiencia de nuestros clientes, a través de tecnologías innovadoras que generen valor en la gestión de sus negocios, particularmente, en un sector tan importante para el desarrollo del país como el inmobiliario. El lanzamiento de este servicio beneficia tanto a los constructores como a los adquirientes al reducir los tiempos de procesos que tradicionalmente ocupaban más tiempo”.
Entre las bondades de la herramienta se destaca que la vinculación de un comprador a un proyecto se efectúa en línea, es decir, la asignación del número de inversión, la separación de la unidad inmobiliaria y la activación del plan de pagos, se habilitan inmediatamente para que el adquiriente pueda hacer el primer aporte. Cabe resaltar que, a través de este proceso, se genera una tarjeta de recaudo digital personalizada para que el comprador realice sus futuros pagos de manera fácil, cómoda y ágil.
En cuanto a la seguridad de la herramienta, Estupiñán enfatiza en que se han implementado fuertes protocolos de cifrado para el envío y almacenamiento de la información de los usuarios, garantizando su privacidad e integridad. De esta manera, la herramienta permite una protección de datos mayor que un proceso de vinculación tradicional donde hay documentos de por medio, ya que requiere menor interacción con la información.