Más del 80 % de las mujeres usa la talla incorrecta de bra. En el panel “Bra Talks”, organizado por Diane & Geordi en Medellín, expertas en moda y mujeres de distintas edades y cuerpos compartieron sus experiencias sobre cómo el bra adecuado no solo transforma un outfit, sino también la relación que cada mujer tiene consigo misma.
Un diálogo sincero sobre confort, estilo, libertad y decisiones conscientes.
Medellín, abril de 2025 – Renovar el bra no suele estar en la lista de prioridades de muchas mujeres, a pesar de ser una prenda que se use a diario. Sin embargo, este gesto íntimo —y aparentemente menor— puede tener un impacto profundo en el bienestar físico y emocional. Esa fue una de las conclusiones del panel “BRA Talks, organizado por Diane & Geordi como parte de su campaña “Sostén todo, hasta tu confianza”.
Durante el encuentro, que reunió a expertas en moda como Caty Villota, la fashionista Mich Macia, la presentadora y periodista SigoPao y la audiencia local, se discutió cómo el bra es mucho más que una prenda funcional. “No se trata de que el bra te dé poder. Se trata de que tú lo elijas porque te hace sentir bien, cómoda, real”, afirmó Caty Villota durante su intervención.
El panel abordó temas como el desconocimiento sobre la talla real del busto, la incomodidad normalizada en el uso del bra, los efectos posturales de un mal ajuste y, sobre todo, la falta de conversación abierta sobre el vínculo entre ropa interior y bienestar emocional. “Muchas mujeres usan el bra que tienen, no el que necesitan. Y eso también habla de cómo nos priorizamos”, agregó Mich Macia.
Según estudios internacionales, más del 80 % de las mujeres usa la talla incorrecta de bra, lo cual puede generar molestias físicas, dolores de espalda y disminución del confort diario. Pero más allá de lo físico, las panelistas coincidieron en que la ropa interior debería ser una extensión del amor propio. “Es lo primero que toca tu piel. ¿Cómo no va a importar?”, dijo la influencer invitada, quien compartió su testimonio sobre redescubrir la comodidad después de años de incomodidad silenciosa.
Desde la visión de marca, Brenda Ramos Cruz, gerente de marketing de Diane & Geordi, recalcó que esta campaña nace de una necesidad real: “Escuchamos constantemente a nuestras clientas decir que no sabían cuánto necesitaban un bra nuevo hasta que se pusieron uno que sí les quedaba. La renovación no es solo estética, es emocional”.
Más que una demostración técnica, la intervención visual durante el panel buscó generar una reflexión íntima: ¿qué pasa cuando lo que llevas debajo te incomoda, aprieta o simplemente ya no representa quién eres hoy? A través de comparaciones visuales, se mostró cómo pequeños detalles —como un tirante más ancho, una copa más envolvente o un broche bien ubicado— pueden transformar por completo no solo un look, sino la sensación de habitar el propio cuerpo con calma y coherencia. No se trató de seguir reglas de moda, sino de reconectar con esa decisión cotidiana que empieza en el clóset, pero impacta mucho más allá.
La conversación también tocó el tema de la libertad de elección: “Usar o no usar bra debe ser una decisión informada, no una imposición cultural. Pero si decides usarlo, que sea uno que te sostenga sin hacerte daño”, afirmó SigoPao. Diane & Geordi confirmó que este tipo de espacios seguirán realizándose en distintas ciudades del país como parte de una apuesta por transformar la forma en que las mujeres se relacionan con su ropa interior: no desde la corrección ni la exigencia estética, sino desde el confort, la conciencia corporal y el respeto por sus propios ritmos.
La campaña es una invitación a elegir lo que te hace bien, incluso en lo más íntimo. A no dejar para después la renovación de una prenda que puede acompañarte en momentos de quietud, trabajo, movimiento o vulnerabilidad. A reconocer que, a veces, el verdadero poder no está en lo que se ve, sino en lo que decides ponerte para sentirte tú.
En un momento cultural en el que cada vez más mujeres cuestionan lo que han heredado sobre cómo “debería” vestirse un cuerpo, esta campaña no impone, propone. Abre un espacio de escucha, de conversación y de redescubrimiento de algo tan cotidiano como elegir un bra, pero tan simbólico como habitarse con libertad.