Por Spiros Paulo Fournogerakis Country Manager DKT South America
Durante septiembre se realizó la Semana Andina de Prevención de Embarazo en la Adolescencia Colombia 2024, la cual dentro de sus cifras nos dejó un número muy preocupante, si no tomamos medidas efectivas ahora, tardamos al menos 78 años para que los embarazos en niñas de entre 10 y 14 años lleguen a cero. Esto plantea a todos los actores involucrados una importante tarea.
Sin embargo esta no es la única preocupación en materia de salud sexual de los ciudadanos colombianos, ya que los casos de VIH también han ido aumentando en el país, sólo entre el 1 de febrero del 2022 y el 31 de enero de 2023 hubo más de 14 mil pruebas que dieron resultado positivo.
Frente a estos números, y la misión que existe a futuro para poder disminuirlos, es que el trabajo que realizamos junto a DKT en el país se hace cada vez más importante.
Actualmente somos el mayor proveedor de productos para planificación familiar en el mundo, llevando adelante nuestro objetivo de democratizar y asegurar el acceso tanto a educación sexual como a métodos anticonceptivos en la población, trabajo que hemos realizado exitosamente en Colombia desde nuestra llegada hasta la fecha, aliándose con diferentes actores en el país, como la Federación Colombiana de Obstetricia y Ginecología, Secretaría de Salud Regional del Magdalena, Humanity & Inclusion, la Universidad Antonio Nariño y la Secretaría de Salud Distrital de Bogotá, a quienes donamos más de 26 mil dispositivos intrauterinos (T de Cobre) durante 2023. Todo esto para hacer frente a las principales problemáticas del país.
Pero sin duda es que nuestra misión durante el último tiempo se ha centrado en apoyar la decisión de elegir de las mujeres, de que sus embarazos sean planificados y deseados, y que en el caso contrario puedan acceder a métodos de interrupción segura del embarazo.
Si bien en Colombia ésto está regulado, sabemos que existen resquemores sobre su implementación, sin embargo es necesario recalcar que las políticas que regulan el aborto en diferentes países no buscan incrementar las cifras de este, por el contrario, el objetivo es proporcionar métodos seguros a los que las mujeres puedan optar sin poner en riesgos sus vidas, algo en lo que DKT ha ayudado y seguiremos haciéndolo, preocupándonos por la salud sexual, reproductiva y mental de cada mujer que lo necesite.
Si bien nuestro trabajo es transversal a la población, independiente de su edad, entendemos que las problemáticas que enfrenta el país actualmente pueden tener una solución si le hablamos directamente a la población más joven del país, generando un cambio en ellos.
Por esta razón, es que tenemos alianzas con universidades, entregando charlas con información sobre educación sexual centradas en la importancia de la prevención, y así poder evitar que las cifras de, por ejemplo, enfermedades de transmisión sexual como el VIH continúen creciendo en el país.
Pero no sólo nos detenemos en la entrega de información, sino que también buscamos mejorar el acceso a los productos de los cuales hablamos, es por esto que también ofrecemos precios especiales en preservativos a aquellos más jóvenes y cuyas entradas de dinero son más limitadas. La prevención no solamente es una tarea de entregar información, sino que también de acción.
Queremos estar en todos los frentes posibles que tengan relación con la educación sexual y reproductiva de las personas. Si bien en un inicio fue difícil, tanto en Colombia como en el resto del mundo, poco a poco hemos logrado salir adelante y posicionarnos, por lo que nuestra meta para los próximos años sigue siendo la misma.
Primero que todo visibilizar estas cifras y poner urgencia en su solución, si hablar de sexualidad sigue siendo un tabú, vamos a seguir contribuyendo a que estos números crezcan hasta que ya sea demasiado tarde. Por esto, es que primero debemos educar, prevenir y asegurarnos que todos tengan acceso a los productos adecuados, un trabajo que se debe hacer en equipo y para lo cual como DKT continuaremos buscando aliados en cada región.