El turismo de aventura, una tendencia que crece rápidamente a nivel mundial, combina emociones intensas, deporte y un estrecho contacto con la naturaleza. En Colombia, Santander se destaca como el principal referente de este tipo de experiencias gracias a su diversidad geográfica y cultural.
El departamento ofrece actividades únicas como el parapente en el imponente Cañón del Chicamocha, rafting en los rápidos del río Fonce, escalada en las formaciones rocosas de la Mesa de los Santos, senderismo en los caminos reales de Barichara, espeleología en la fascinante Cueva del Indio y rutas interesantes para aquellos que practican el ciclismo. Cada una de estas experiencias permite a los viajeros desafiarse física y mentalmente mientras disfrutan de paisajes inigualables.
Alejandra Castillo, gerente del Hotel Punta Diamante, resalta el atractivo de Santander: “Gracias a nuestra ubicación privilegiada, los visitantes pueden combinar la adrenalina de estas actividades con la comodidad de un hotel cinco estrellas. Desde aquí, tienen acceso a aventuras como el parapente, una experiencia que conecta emociones fuertes con vistas espectaculares”.
Según cifras de Migración Colombia y el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, entre enero y julio de este año llegaron al país 3.701.202 turistas internacionales, un 7,7% más que en el mismo periodo del año anterior, generando 4.770 millones de dólares en divisas, un crecimiento del 15,3%. Muchas de estas visitas se concentran en destinos como Santander, que ofrecen una combinación única de aventura y naturaleza.
El auge del turismo en Santander también impulsa iniciativas de sostenibilidad, con empresas comprometidas con la preservación de los ecosistemas y el desarrollo económico local. Esto garantiza un turismo responsable que no solo atrae a visitantes, sino que también beneficia a las comunidades de la región. Santander invita a los viajeros a explorar su riqueza natural, vivir experiencias llenas de adrenalina y reconectar con la autenticidad cultural del departamento.