Por Guillermo Romero Salamanca-comunicaciones CPB
En una reunión en el Inalde, ante unos 100 empresarios del país, invitado para hablar sobre Periodismo –tema que le apasionó durante su vida—les dijo: “El periodista no es juez, ni maestro, ni científico, ni legislador, sino un mediador en la comunicación”.
Minutos después les comentó: “Un periodismo que se ocupa sólo del cómo comunica, no del qué comunica, ni del para qué comunica, está condenado a la esterilidad”.
Y agregó en un rato: “El verdadero periodismo no es una sociedad de mutuo elogio. Su gran deficiencia es la falta de autocrítica”.
Desde muy joven comenzó a escribir para varios medios de comunicación, no sólo de su natal Medellín, sino de distintas partes del continente y de Europa. Estudió Filosofía en la Universidad de Navarra, en Pamplona, España y después, durante su estadía en Estados Unidos, aprendió inglés y adelantó cursos de postgrado en la Universidad de Stanford.
A su regreso al país fue nombrado como director de la Asociación para la Enseñanza –Aspaen—y luego contribuyó en el nacimiento del INSE, que posteriormente se convirtió en la Universidad de La Sabana. Fue consultor de ministerios y de varias instituciones dedicadas a la educación.
En los años 80 fue cofundador de la Promotora de Medios –Promec TV- con la cual impulsó programas familiares como “Dialogando” y “Valores Humanos” y dedicó buen tiempo a las producciones sobre los líderes colombianos en “Revivamos nuestra historia”. Fue también cofundador de la Agencia de Noticias Colprensa, medio que reunió a los periódicos regionales y la convirtió en una entidad de prestigio periodístico no sólo en Colombia sino en el exterior.

Al mismo tiempo fue director de Arco, la revista del pensamiento colombiano, donde escribieron catedráticos, analistas políticos, escritores y muchos, muchos poetas que le impulsaron a escribir decenas de versos.
Columnista de docenas de medios y escritor de más de 60 obras sobre Valores Humanos, Cómo hablar en público, poemas, pensamientos, televisión y familia.
Después de su paso por Promec y Colprensa fundó con un grupo de amigos el Instituto Latinoamericano de Liderazgo, que le permitió dictar conferencias en universidades, empresas y entidades nacionales e internacionales en más de una docena de países.
Dirigió también ARCO, la revista del pensamiento colombiano, donde congregó a la élite del pensamiento político, económico, social, educativo y de los gremios del país. En diversas tertulias se encontraron personalidades como Jaime Sanín Echeverri, Gerardo Molina, Gilberto Vieira, Eduardo Carranza, Ernesto Samper, Belisario Betancur, Álvaro Salom Becerra, Fernando Soto Aparicio, Fernando Ávila, Carmen del Hierro Santacruz, el general Álvaro Valencia Tovar, José Salgar, entre muchos otros.
Durante más de 20 años, mientras escribía sus columnas y sus libros, dictó conferencias en Estados Unidos, España, Venezuela, Panamá, Argentina, Chile, Perú, Ecuador, Puerto Rico, México y República Dominicana como presidente del Instituto Latinoamericano de Liderazgo.
Autor de más de 60 libros sobre Humanismo y Sociedad, maestro de periodistas, hombres y mujeres de medios, profesor y catedrático y educador de larga trayectoria.
El periodismo fue uno de los temas fundamentales de sus columnas periodísticas y de sus libros. Desde el 2000 hizo parte del Círculo de Periodistas de Bogotá (CPB) y se preocupó siempre por fomentar el emprendimiento personal y profesional de docenas de jóvenes que adelantaron estudios de Comunicación Social y Periodismo.
El 18 de julio del 2024 falleció en Bogotá luego de unos padecimientos de salud dejando una huella imborrable en decenas de alumnos y discípulos a los cuales les inculcó valores y el respeto por las libertades de expresión y de prensa.
“¿Qué es ser Periodista?”, tituló en una de sus columnas: “Es trabajar por la verdad, buscarla y expresarla dejando a un lado los prejuicios propios o ajenos”.