Un día después de que Naomi Osaka se convirtiera en la primera tenista en encender un pebetero olímpico durante la ceremonia de apertura, Novak Djokovic afirmó que el perfil mundial de este deporte se ha visto impulsado en los Juegos de Tokio.
Osaka, cuatro veces campeona de torneos del Grand Slam e hija de un haitiano y una japonesa, fue la última portadora de la antorcha olímpica el viernes por la noche, en un momento que ha sido descrito como un reflejo de la creciente diversidad de Japón y de los Juegos.
El tenis también es seguido con mayor interés en los Juegos debido al intento del serbio de convertirse en el primer hombre en completar el “Golden Slam”, algo que únicamente logró la alemana Steffi Graf en 1988.
Para lograrlo, Djokovic debe ganar los cuatro torneos grandes del circuito -de los que ya conquistó los abiertos de Australia y Francia y Wimbledon- y el oro olímpico en individuales en el año.
“La situación no puede ser mejor para nuestro deporte”, dijo Djokovic a periodistas tras su victoria en primera ronda en el Parque de Tenis Ariake.
El serbio es el único de los tres grandes del tenis que ha viajado a Tokio después de que Roger Federer y Rafa Nadal optaran por no acudir a los Juegos.
“Obviamente no están Roger y Rafa, que son grandes estrellas y leyendas de nuestro deporte, pero aún así hay muchos grandes jugadores, Osaka es la favorita en casa y hay muchos ojos posados sobre ella. Ser local supone mucha presión”, señaló.
“Pero es genial para nuestro deporte en general, ver que hay mucha atención”, agregó.
(Reporte de Rozanna Latiff. Editado en español por Javier Leira)
Yahoo Noticias Por Sudipto Ganguly y Rozanna Latiff Agencia Reuters Foto internet Reuters