El gigante farmacéutico estadounidense Merck pagará hasta 22.000 millones de dólares a la japonesa Daiichi Sankyo en el marco de una alianza para desarrollar y comercializar fuera del archipiélago nipón tres tratamientos experimentales contra el cáncer, dijeron viernes ambos grupos.
Estos tratamientos desarrollados por la firma nipona se llaman anticuerpos conjugados (ADC, según las siglas en inglés) y son unas terapias que atacan las células cancerígenas con más precisión y menos efectos secundarios.
En un primer tiempo, Merck debe pagar 4.000 millones de dólares a Daiichi Sankyo y después realizará pagos suplementarios en función del cumplimiento de objetivos de futuras ventas hasta un máximo de 22.000 millones, según un comunicado conjunto.
Las acciones de la farmacéutica llegaron a subir casi un 18% en la bolsa de Tokio después del anuncio y luego se estabilizaron en alrededor del 13% en la interrupción de la sesión a mediodía.
“En un momento en que Daiichi Sankyo continúa su transformación en líder mundial de la oncología reforzando su infraestructura y su talento, una colaboración con Merck nos permitirá” poner estos tratamientos “a disposición del mayor número de pacientes lo más rápido posible”, dijo el director general de la farmacéutica nipona, Sunao Manabe, citado en el comunicado.
Los tres tratamientos se encuentran en distintas fases de desarrollo clínico para poder aplicarse de forma individual o combinada en múltiples tipos de tumores sólidos.
Una de ellas, el patritumab deruxtecan para el cáncer de pulmón, buscará la autorización de las autoridades estadounidenses en marzo de 2024, dijeron las empresas.
– Mercado ontológico –
“El trabajo pionero de los científicos de Daiichi Sankyo ha puesto en evidencia el potencial considerable de los ADC para ofrecer nuevas opciones significativas a los pacientes de cáncer”, dijo el jefe de Merck, Robert Davis.
“Estamos impacientes de desarrollar esta colaboración para suministrar la próxima generación de medicamentos anticancerígenos de precisión”, agregó en este comunicado.
El grupo nipón ya disponía de una asociación con la británica AstraZeneca por el biomedicamento Enhertu contra el cáncer de pecho, además de otro tratamiento contra el cáncer de pecho y de pulmón.
De su parte, el laboratorio estadounidense consigue reforzar su porfolio en el mercado oncológico actualmente ya dominado por su fármaco Keytruda, cuya patente caduca esta década, según Bloomberg.
El año pasado, Merck intentó adquirir la biotecnológica Seagen, especializada en tratamientos oncológicos y las terapias ADC, pero finalmente fue el gigante farmacéutico Pfizer quien la compró en marzo por 43.000 millones de dólares.
El jefe de Pfizer, Albert Bourla, dijo entonces que “la oncología sigue siendo el principal motor de crecimiento de la medicina en el mundo”.
Yahoo Noticias Agencia AFP