
Bogotá, 27 de octubre de 2025. La nueva flota reducirá en un 78% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en Bogotá y eliminará la emisión de material particulado, mejorando la calidad del aire y beneficiando a más de 2 millones de usuarios diarios con un servicio más limpio, eficiente y amigable con el medio ambiente.
El Departamento Nacional de Planeación (DNP) indicó que la flota eléctrica se pone en marcha con la aprobación del documento Conpes 4168, de Importancia Estratégica para la cofinanciación de la flota eléctrica del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP).
La inversión de 1,5 billones de pesos, de los cuales la nación aporta el 62,4%, contempla la incorporación de 269 nuevos buses eléctricos para Soacha y Bogotá —157 articulados y 112 biarticulados— que impulsan la transición energética, la descarbonización del transporte público y la reindustrialización.
“La provisión de flota eléctrica para el SITP de Bogotá no es solo una inversión en movilidad sino en salud, sostenibilidad y desarrollo productivo. Es un paso hacia una Colombia más limpia, competitiva y con más empleos verdes, que reflejan el cumplimiento del programa de Gobierno del presidente Petro”, destacó Natalia Irene Molina Posso, directora del DNP.
El proyecto está alineado con el Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026 ‘Colombia, Potencia Mundial de la Vida’ porque contribuye directamente a la meta de mitigar 2,14 millones de toneladas de CO₂ del sector transporte para 2030, en el marco de la acción climática nacional.
Actualmente, el sistema de transporte público cuenta con 1.486 buses eléctricos en sus componentes zonal y de alimentación. Sin embargo el componente troncal —que moviliza cerca de 2 millones de pasajeros diarios— aún opera con combustibles fósiles.
Con esta nueva flota, Bogotá se consolidará como la ciudad latinoamericana con el mayor número de buses eléctricos articulados y biarticulados en operación, electrificando la columna vertebral del sistema.
El ingreso de los nuevos buses se realizará en tres lotes, con el primer grupo programado para el segundo semestre de 2026.
El DNP destacó que la cofinanciación se extenderá entre el 2027 y el 2040, asegurando la sostenibilidad financiera y la operación a largo plazo del sistema.
El éxito de este proyecto es el resultado del trabajo articulado entre el Gobierno nacional —a través del DNP, el Ministerio de Transporte y el Ministerio de Hacienda— y el Gobierno Distrital, con la participación de la Alcaldía Mayor de Bogotá, la Secretaría Distrital de Movilidad, la Secretaría Distrital de Hacienda y Transmilenio S.A.
Inversión conjunta por la sostenibilidad
El proyecto cuenta con una inversión total de 1,5 billones de pesos (cifras constantes a diciembre de 2024), bajo un esquema de cofinanciación entre la Nación y el Distrito Capital:
• Gobierno nacional: 62,4% ($0,93 billones de pesos)
• Distrito Capital: 37,6% ($0,5 billones de pesos)
Componentes principales del proyecto:
• Flota eléctrica: La nueva flota estará compuesta por 269 buses eléctricos, de los cuales 157 serán articulados (capacidad de 160 pasajeros cada uno) y 112 biarticulados (250 pasajeros cada uno), todos diseñados con criterios de accesibilidad universal.
• Infraestructura de recarga: Se electrificará el Patio Calle Sexta en Bogotá, con obras civiles, redes eléctricas, cargadores y sistemas de gestión de energía. Además, el proyecto complementará la adecuación del Patio El Vínculo en Soacha, con recursos propios del Distrito.
• Sistemas Inteligentes de Transporte (ITS): La flota contará con tecnología de punta para la gestión y el control en tiempo real, interoperado con la red existente del SITP y mejorando la trazabilidad, seguridad y eficiencia del servicio.
Beneficios para la ciudadanía y el territorio
1. Aire más limpio y mejor salud:
La nueva flota eléctrica reducirá en un 78% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) frente a los buses a gas y en un 73% frente al diésel, con una disminución estimada de 224.000 toneladas de CO₂ en los próximos 15 años.
Además, eliminará la emisión de material particulado (PM2.5 y PM10), mejorando la calidad del aire y reduciendo los riesgos de enfermedades respiratorias, especialmente en la población más vulnerable.
2. Movilidad más eficiente:
• Reducción del 15% en los tiempos de viaje entre Soacha y Bogotá.
• Aumento del 12% en la capacidad de pasajeros del componente troncal.
• 340 nuevas plazas en hora pico y mayor confiabilidad del servicio.
3. Sostenibilidad económica:
Los buses eléctricos tendrán costos operativos 21,6% menores por kilómetro frente a los de gas, y un costo total de propiedad un 9% inferior durante su vida útil. La cofinanciación nacional permitirá reducir el déficit estructural del SITP en cerca del 3% entre 2025 y 2035, liberando recursos para nuevas mejoras del sistema.
4. Impulso a la industria nacional:
La implementación de este proyecto dinamizará la cadena productiva local de electromovilidad, generando oportunidades para fabricantes de componentes eléctricos, servicios de mantenimiento especializado, soluciones ITS y gestión energética, fortaleciendo la industria verde nacional.
El trabajo articulado entre el Gobierno nacional y el Distrito Capital demuestra que las alianzas territoriales son el camino para avanzar hacia una movilidad moderna, equitativa y respetuosa con el ambiente.
Con información del Departamento Nacional de Planeación (DNP)


