Con una operación cada vez más eficiente y automatizada, Cusezar proyecta alcanzar en 2025 una autosuficiencia del 95% en la producción de concreto requerido para sus proyectos, fortaleciendo su compromiso con la calidad, la productividad y la sostenibilidad en el desarrollo urbano.
Durante 2024, la compañía logró abastecer el 85% del concreto utilizado en sus obras, lo que representó un crecimiento del 16% en su capacidad productiva frente al año anterior. Este avance es fruto de una estrategia de transformación que ha incluido la automatización de procesos, la mejora en el control de calidad y la optimización en el uso de materias primas.
Uno de los hitos más relevantes de esta evolución fue la instalación de una nueva planta de concreto en el plan parcial La Marlene, en Bogotá, que actualmente abastece el 100% de los ocho proyectos de vivienda de interés social (VIS) que Cusezar desarrolla en esta zona y el concreto que se requiere para la ejecución de todo el urbanismo. Esta planta no solo garantiza el suministro eficiente con los tiempos requeridos por las obras, sino que también reduce costos logísticos y contribuye a una mejor trazabilidad del producto, cumpliendo todos los estándares de calidad.
“Esta transformación de nuestra operación de concretos nos ha permitido no solo producir más, sino hacerlo mejor, con mayor eficiencia y sostenibilidad. Estamos fortaleciendo nuestra promesa de valor y garantizando una construcción responsable en cada etapa del proceso”, afirmó el gerente de control de proyectos de Cusezar, Mauricio Mejía.
Cusezar también ha fortalecido su laboratorio de control de calidad, estableciendo un monitoreo técnico automatizado de los indicadores de producción y estandarizando procedimientos administrativos y técnicos que elevan el desempeño general de la operación.
Esta estrategia de autosuficiencia busca responder al crecimiento del portafolio de la compañía y a la necesidad de ofrecer soluciones cada vez más competitivas en el mercado de vivienda, especialmente en los segmentos VIS y VIP, donde la eficiencia y la sostenibilidad son clave.
“Nuestro objetivo no es solo crecer, sino hacerlo con calidad y con propósito. Al controlar directamente la producción de concreto, aseguramos mejores resultados en obra, contribuimos a la sostenibilidad del entorno y seguimos cumpliendo el sueño de miles de familias colombianas”, concluyó Mauricio Mejía.