El sector de la belleza en Colombia es una industria en crecimiento y un motor económico, con ingresos anuales proyectados de más de 17.6 Billones de pesos para 2025 y con una expectativa de crecimiento anual del 4,43 % durante los próximos cinco años según datos de Statista. Además, brinda oportunidades de empleo y emprendimiento a la población LGBTIQ+ y población migrante.
Con el propósito de contribuir al fortalecimiento de este sector e impulsar la prosperidad de las comunidades en Colombia, Henkel desarrolla programas que brindan formación, habilidades y confianza a personas que enfrentan barreras estructurales.
Recientemente, se realizó la graduación de 19 personas de la comunidad LGBTIQ+ que participaron en uno de los programas de becas otorgados por Henkel y sus marcas Schwarzkopf Professional, Authentic Beauty Concept, Tec Italy y Küül, donde los participantes reciben clases, capacitaciones, herramientas y apoyos alrededor del cuidado capilar, la coloración, el corte y el peinado con el fin de transformar vidas a través de la belleza y del arte del peinado y la estética.
Una de las graduadas del programa fue Angie Tatiana Yate, de 23 años, quien compartió su experiencia como participante: “Estos programas realmente son necesarios porque dan oportunidades que a largo plazo se pueden volver bienestar para las personas”.
Como ella, ya son más de 3.000 personas alrededor del mundo que han hecho parte de Shaping Futures de Henkel, una iniciativa que hace un esfuerzo por cerrar brechas de desigualdad, con la misión de inspirar y empoderar a las personas en Colombia para apoyarles a construir un futuro lleno de posibilidades.
“A través de los programas de educación, no solo formamos en técnicas de estilismo y peluquería, sino que también hacemos un esfuerzo por cerrar brechas de desigualdad y apoyar a las personas a construir un futuro lleno de posibilidades”, destacó Claudia Rengifo, Head de Educación de Henkel.
Testimonio de amor y pasión
Originaria de Ibagué y habitante de la Sabana de Bogotá, Angie se graduó de Ciencias Políticas con el apoyo de la Alcaldía de Cajicá por su participación en mesas comunitarias y juveniles, pero su pasión siempre había sido el mundo de la belleza: desde muy joven trabajó en cosmetología y como auxiliar para lavado de cabello, mientras estudiaba.
Luego de graduarse, se independizó y realizó trabajos estructurando proyectos para financiar actividades comunitarias del municipio donde habita. Sin embargo, ante los retos del mercado laboral y persiguiendo su sueño de niña de vivir de la belleza, fue aceptada como una de las becarias del programa Shaping Futures, una iniciativa global de Schwarzkopf Professional, diseñado para empoderar a personas en situación vulnerable mediante el arte de la peluquería.
Además, recibió una beca adicional por parte de Henkel para continuar con su formación técnica, práctica y teórica. Esta incluyó temas como la expresión del color y la personalidad con Küül, el bienestar y la experiencia con Authentic Beauty Concept, la amplitud en la técnica y tecnología para el cuidado del cabello con Schwarzkopf Professional y los aromas como complemento para el bienestar con Tec Italy; todo con el acompañamiento de técnicos educadores como Hermán Marroquín, Martín Vidal, Camilo Hincapié y Alexánder Santos de la Academy of Hair de Henkel, ubicada en Bogotá.
Sin discriminación
Los grupos en los que participó se convirtieron también en espacios de comunicación, donde todos los participantes recibieron conocimientos, apoyos y herramientas como insumo para desarrollarse y motivarse a transformar sus vidas, fortaleciendo su gusto por este arte, expresando su emoción y construyendo un ambiente ameno para aprender y compartir experiencias.
“Estos programas son necesarios de replicar para todas las comunidades”, destacó Angie el día de su graduación. “En este caso fue beneficiada la comunidad LGBTIQ+, donde existen diferentes dimensiones de situaciones como discriminación, algunas más que otras, principalmente en mujeres trans que sufren un mayor nivel de exclusión por cuestiones principalmente culturales”.
Hoy expresa que quiere disfrutar de su vida mientras logra tener una remuneración a través de lo que hace, ahora con un trabajo estable en un salón de belleza y con la ilusión de en unos años tener su propia peluquería. Además, reconoce que aquí no termina la educación frente a todo el tema de la belleza y es importante la actualización constante frente a las nuevas tendencias y estilos.
“Puedo decir que tengo formación de técnica capilar y como estilista, complementos donde la idea es que a las personas que atienda pueda compartirles lo que aprendí y que disfruten estar conmigo”, concluye Angie, y agrega: “Aquí pude aprender cómo llegar a una persona y que esa persona se sienta bien”.