Ingresos municipales dependen en 50% de giros de la Nación, profundizando brechas en autonomía fiscal: análisis

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Solo los municipios de categoría especial generan más recursos propios que transferencias.

ICA y Predial concentran hasta el 69% del recaudo y a medida que se baja en las categorías su relevancia disminuye.

La mayor parte de los recursos de capital, son los recursos de balance, que son saldos no ejecutados de vigencias anteriores.

Bogotá, 03 de diciembre de 2025. El Observatorio Fiscal de la Pontificia Universidad Javeriana presenta un análisis descriptivo del comportamiento del recaudo de los municipios del país durante 2024, en el que identifica las principales fuentes de financiación, las disparidades entre municipios, los niveles de esfuerzo fiscal y los retos para fortalecer la autonomía territorial.

En total, en 2024, los ingresos de las entidades territoriales ascendieron a $197,5 billones, de los cuales $146,5 billones correspondieron a los municipios y $51 billones a los departamentos.

Colombia cuenta con 1.103 municipios, cuya principal fuente de ingresos en 2024 fueron las transferencias de la Nación, con $72,8 billones (50%) del total, seguidas por los recursos propios con $49,6 billones (34%) y los recursos de capital con $24,1 billones (16%). Esta estructura revela una alta dependencia de recursos condicionados y una limitada autonomía fiscal.

La autonomía fiscal municipal depende de la generación de recursos propios, que en 2024 sumaron $49,6 billones, de los cuales el 86% son tributarios y el 14% no tributarios. No obstante, su distribución es desigual, pues solo los municipios de categoría especial financian más de la mitad de su presupuesto con estos recursos, mientras que en categorías cuarta a sexta apenas aportan entre 15% y 20%. Esta brecha responde a diferencias en capacidad económica y administrativa entre municipios.

En 2024, los municipios recaudaron $42,7 billones en impuestos. El ICA aportó $17,2 billones (40%) y el Predial $12,4 billones (29%), siendo las principales fuentes en municipios de mayor categoría. En los más pequeños, pierden peso y aumentan la sobretasa a la gasolina y las estampillas, que incluso pueden ser la primera fuente tributaria. Desde el Observatorio Fiscal alertamos que la desactualización catastral y la heterogeneidad del ICA continúan limitando la eficiencia del sistema tributario territorial.

Los ingresos no tributarios, aunque menores dentro de los recursos propios, son claves para muchos municipios. En 2024 sumaron $6,9 billones, provenientes de multas, tasas, contribuciones, derechos de monopolio y venta de bienes y servicios. Su peso aumenta en municipios de categorías cuarta a sexta, donde ayudan a compensar la debilidad tributaria.

Las transferencias nacionales son la principal fuente de financiación municipal. En 2024 alcanzaron $72,8 billones, de los cuales el SGP aportó $46,1 billones (63%).

La dependencia es alta. En total, en 695 municipios el SGP representa al menos 40% de sus ingresos; en 332, el 50%; y en 95, más del 60%. Aunque la reciente reforma al SGP incrementará estos recursos, su impacto dependerá de una mayor capacidad de gestión y de evitar la subejecución en municipios pequeños.

Los recursos de capital alcanzaron $24,1 billones en 2024, pero están dominados por los recursos del balance, que son saldos no ejecutados de vigencias anteriores, y representan el 55% del total. Esta dependencia revela una baja capacidad de ejecución en gran parte de los municipios.

Desde el Observatorio Fiscal se identifica que la combinación de la alta dependencia de transferencias, las débiles capacidades de generar ingresos propios, las limitaciones para acceder al crédito y la baja ejecución presupuestal restringe la autonomía fiscal del nivel local y profundiza las brechas entre municipios.

Fortalecer el recaudo, mejorar las capacidades administrativas y garantizar la adecuada implementación de la reforma al SGP serán pasos clave para avanzar hacia una descentralización fiscal efectiva y sostenible.