Bogotá, octubre de 2024. En cada región de Colombia se encuentra una expresión única de la identidad cultural. Desde las festividades más coloridas hasta las tradiciones ancestrales de los pueblos indígenas, el patrimonio del país es una fuente inagotable de inspiración.
De allí que cada año se conmemore la diversidad cultural y étnica para enaltecer la importancia de preservar las raíces, transmitir las tradiciones a las futuras generaciones y garantizar que la identidad cultural perdure en el tiempo. Esta celebración es una oportunidad para reflexionar sobre el valor de las múltiples expresiones culturales que coexisten en en el territorio
A propósito del Día de la Diversidad Étnica y Cultural, en cada 12 de octubre, Movich Hotels invitó a disfrutar de la riqueza cultural de Colombia. Con siete hoteles ubicados en las principales ciudades del país, cada espacio de Movich está diseñado para reflejar las tradiciones, sabores y expresiones que hacen de Colombia un destino tan especial. La cadena hotelera es un reflejo vivo de la diversidad cultural de Colombia.
“Desde nuestros primeros días, hemos estado comprometidos con ofrecer una experiencia colombiana auténtica y memorable”, expresó Laura Quintana, vicepresidente Comercial de Movich Hotels.
“Hoy, más que nunca, estamos convencidos de que Colombia es un destino que debe ser explorado con todos los sentidos. Nuestra cadena ha evolucionado, pero nuestra pasión por este país sigue siendo la misma: queremos que cada huésped se sienta como en casa y se lleve consigo un pedacito de nuestra cultura”, asegura.
Desde Bogotá hasta Cartagena, cada lugar invita a sumergirse en la historia y las raíces culturales de su entorno, brindando a los viajeros una ventana a las tradiciones colombianas. Movich Buró 26, en la capital, está estratégicamente ubicado para ofrecer acceso a las principales expresiones culturales de la ciudad. Su diseño combina elementos modernos con referencias a la riqueza indígena y colonial del país. Los viajeros pueden disfrutar de eventos culturales cercanos como las festividades de Usaquén o explorar la oferta artística del Museo del Oro.
En el corazón del Eje Cafetero, Movich Pereira invita a descubrir las tradiciones de la región cafetera, donde se mezclan los paisajes naturales con una profunda herencia cultural. Las visitas a fincas cafeteras y mercados de artesanías cercanos permiten a los huéspedes explorar las costumbres de la zona. En las instalaciones, los detalles del diseño se inspiran en los textiles y técnicas locales del procesado del café, haciendo que cada rincón cuente una historia.
El lugar ideal para quienes desean explorar el espíritu innovador y creativo de Antioquia, es Movich Las Lomas, en Rionegro, a pocos minutos de Medellín. Las Lomas está rodeado de naturaleza y montañas, ofreciendo a los visitantes un ambiente tranquilo que contrasta con la vibrante vida cultural de la ciudad. Los colores y texturas locales están presentes en los espacios comunes, creando un ambiente cálido y acogedor que resalta la esencia paisa.
Cartagena de Indias, conocida por su historia colonial y su herencia afrodescendiente, es otro de los destinos que Movich abraza con orgullo. Desde su ubicación privilegiada, los visitantes tienen la oportunidad de caminar por las calles de la Ciudad Amurallada, donde la fusión de culturas se manifiesta en su arquitectura, arte y gastronomía. Los espacios dentro del hotel están decorados con elementos que evocan la rica tradición artesanal de la región, desde tejidos hasta cerámica local.
Por su parte, Movich Barranquilla se convierte en el lugar perfecto para quienes desean experimentar de cerca la alegría y diversidad de la cultura caribeña. La ciudad, famosa por su carnaval, es el epicentro de la música, la danza y las tradiciones afrocaribeñas. Los detalles arquitectónicos del espacio integran motivos tropicales y caribeños, conectando a los huéspedes con la esencia de la región.
Cada hotel no solo es un lugar para descansar, sino también un portal hacia la riqueza cultural de Colombia. Los visitantes pueden disfrutar de experiencias gastronómicas que resaltan los sabores tradicionales de cada región, desde los platos típicos antioqueños en Rionegro hasta los sabores caribeños en Cartagena. Además, cada detalle en el diseño interior refleja el patrimonio cultural de cada destino, brindando una experiencia auténtica y local.