Preparándonos para la presencialidad

804

Por: Alfonso López, líder de aprendizaje experiencial de LIT Liderazgo Integral Transformacional

En estos tiempos de cambios constantes, algunas organizaciones han decidido dar un paso hacia la presencialidad. Esta situación plantea interrogantes en las áreas de Gestión Humana: ¿Nuestro plan de capacitación diseñado para este nuevo año contempla los factores que surgen con esta transición?

Observando comentarios en redes sociales, es evidente cómo el retorno a la presencialidad ha generado miedos y creencias limitantes en algunos casos. Por un lado, algunas personas valoran la virtualidad por la cercanía que brinda con sus seres queridos, la eliminación de tiempos de desplazamientos y la posibilidad de cumplir objetivos sin estar físicamente en la oficina. Sin embargo, también surgen inconvenientes como la falta de interacción con los compañeros, la pérdida de conexiones personales y la sinergia que surgía de forma natural en esos espacios de convivencia.

Nuestro plan de capacitación debe ir más allá de adaptarse al entorno actual. Debemos anticiparnos a las situaciones futuras que pueden afectar los resultados de la organización.

Por ello, propongo diseñar un programa de Onboarding (inducción) post pandemia. Es momento de repensar el concepto de inducción, ya que nuestros colaboradores regresan a la presencialidad después de tiempo de virtualidad. Este momento representa un punto de inicio, un “momento cero”.

¿Qué debe abarcar un programa onboarding en nuestro plan de capacitación?

Debemos incluir actividades que nos permitan afrontar el cambio considerando aspectos como:

·         Crear una cultura de seguridad psicológica para generar confianza y bienestar en el equipo.

·         Implementar programas de apoyo emocional para cuidar el bienestar mental de nuestros colaboradores.

·         Ofrecer programas de gestión del cambio que faciliten una transición efectiva hacia la presencialidad.

·         Proporcionar herramientas de control y manejo del tiempo, promoviendo la eficiencia y el equilibrio en el trabajo.

·         Desarrollar programas de Endomarketing o reenganche con la organización para fortalecer la conexión con la empresa.

·         Realizar una planeación detallada para asegurar una transición fluida.

·         Fomentar el trabajo en equipo para generar nuevamente la sinergia necesaria en el colectivo.

Es fundamental que consideremos un retorno a las actividades presenciales de forma paulatina, permitiendo a nuestros colaboradores adaptarse a horarios, traslados y socializar con otros miembros de la organización. En esta transición, podemos llevar a cabo el plan de onboarding post pandemia como preparación para una presencialidad total, si esa es la decisión final.

Además, es importante que el área de Gestión Humana revise los aprendizajes obtenidos durante la virtualidad y promueva la posibilidad de mantener de forma híbrida aquellos roles o procesos que, debido a los resultados obtenidos, pueden seguir desarrollándose de manera virtual.

En LIT Liderazgo Integral Transformacional, comprendemos la importancia de adaptarnos a los cambios y construir un ambiente de trabajo que promueva la excelencia operacional y el bienestar de nuestros colaboradores. Nuestro plan de capacitación está enfocado en prepararnos para este nuevo escenario laboral y abrazar los desafíos que nos depara la vuelta a la presencialidad.