Un estudio de la marca Tork, antes Familia Institucional, reveló que, en Colombia, solo 2 de cada 10 personas se sienten seguras en términos de higiene y salud al usar baños públicos. Promover espacios seguros y limpios no es solo una medida sanitaria: es una decisión estratégica que impacta la salud y el bienestar de millones de trabajadores.
Una mala experiencia en los baños representa un riesgo directo para la reputación y los ingresos de las empresas.
Bogotá, octubre 14 de 2025. Cada año, el 15 de octubre nos invita a detenernos y reflexionar sobre un acto cotidiano que, sin embargo, tiene un poder enorme: lavarse las manos con agua y jabón.
Es fundamental recordar que esta práctica básica de higiene no solo protege la salud individual, sino que también impulsa la productividad y el bienestar económico de los países. Pese a su demostrada eficacia y bajo costo, la calidad de la higiene en los espacios públicos, especialmente en los baños, sigue siendo una preocupación latente en Colombia y Latinoamérica.
La preocupación en cifras: un problema de acceso e infraestructura.
Datos recientes demuestran que la preocupación por la higiene pública es alta en la región. Un estudio de la marca Tork, antes Familia Institucional, reveló que en Colombia solo 2 de cada 10 usuarios se sienten seguros en términos de higiene y salud al usar baños públicos, una cifra que se reduce en personas con condiciones físicas o cognitivas específicas, poniendo en relieve un problema de higiene inclusiva.
La falta de instalaciones adecuadas para el lavado de manos con agua y jabón, así como la baja disponibilidad de toallas de manos desechables sigue siendo un obstáculo significativo.
A nivel global, miles de millones de personas carecen de acceso a estas instalaciones en sus hogares, y este problema se extiende a los entornos educativos: según el estudio Higiene Global realizado por el Centro para Control y la Prevención de Enfermedades y Unicef, Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia se estima que 462 millones de niños a nivel mundial no tienen acceso a instalaciones para el lavado de manos en la escuela.
En América Latina y el Caribe, el panorama escolar es preocupante: el 40 % de los centros educativos no contaban con un servicio básico de higiene (agua y jabón disponibles) antes de la pandemia, afectando a 61 millones de estudiantes.
Esta deficiencia tiene consecuencias directas. En América Latina y el Caribe, el panorama escolar es preocupante: el 40 % de los centros educativos no contaban con un servicio básico de higiene (agua y jabón) antes de la pandemia, afectando a 61 millones de estudiantes.
La higiene de manos no solo salva vidas; impulsa la economía. Invertir en la mejora de la higiene de manos es una de las estrategias de salud pública más rentables. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que mejorar la higiene de manos en entornos de atención médica puede ahorrar hasta $16.5 dólares por cada dólar invertido, demostrando un retorno económico robusto.
Pero, las malas experiencias en los baños públicos se traducen en un riesgo real para la reputación y los ingresos empresariales. Cuando solo 1 de cada 5 baños cumple con las expectativas de higiene y limpieza, la desconfianza del usuario se dispara. En el estudio global de Essity (compañía matriz de Tork) de Higiene y Salud en 2024, el 75 % de las personas siente preocupación por la salud e higiene en los baños públicos, lo que provoca un cambio de hábitos y una tendencia a ser más exigentes.
Empresas e industrias: en la búsqueda de soluciones
La Dra. Bertha Cecilia Lacouture, bacterióloga con magíster en Microbiología y especialista en Gerencia y Auditoría de la Calidad en Salud, subraya la importancia de ir más allá del mínimo: “Para crear una cultura de bienestar, las organizaciones deben ver la higiene no como un costo, sino como una inversión estratégica. Un ambiente limpio y accesible reduce la transmisión de patógenos y, crucialmente, demuestra el valor que una empresa le otorga a la salud de las personas. La limpieza es, de hecho, un reflejo de la calidad general de un negocio.”
El compromiso con la higiene debe ser inclusivo. Tork ha hecho de la Higiene Inclusiva un pilar fundamental, con el objetivo de eliminar las barreras para que el mayor número posible de personas tenga un acceso cómodo a los baños públicos, independientemente de sus capacidades, necesidades o circunstancias.
La higiene incompleta: Un riesgo sanitario y de reputación
Carlos Soto, senior product manager de Tork Latam, comentó: “Creemos firmemente que todo el mundo merece poder lavarse las manos. La clave está en diseñar entornos de baño que consideren toda la gama de productos, garantizando que la higiene sea realmente accesible para todos, desde los clientes hasta el personal de limpieza. Al invertir en higiene, las empresas no solo protegen la salud pública, sino que construyen una reputación de cuidado y responsabilidad que genera lealtad e ingresos.”
“El Día Mundial del Lavado de Manos es un recordatorio de que esta práctica sencilla pero vital sigue siendo nuestra primera línea de defensa. Manos limpias, vidas saludables, economías robustas. El desafío en Latinoamérica es transformar la preocupación en acción sostenida para que la promesa de la higiene sea una realidad para todos” concluyó.