A Puerto Carreño, en el suroriente colombiano, arribó Astara, compañía especializada en movilidad, para aportar su grano de arena en el “Proyecto Vichada” de la mano del Astara Team, su escuadra de automovilismo de aventura que participa desde 2022 en el Rally Dakar, la competencia deportiva que desafía los límites en el desierto que despierta la máxima adrenalina.
Para lograr el balance neto cero, las 33,71 toneladas de CO2 emitidas en su participación en la edición 2024 de la carrera han sido compensadas con la plantación de eucaliptos, especie utilizada para restaurar sabanas degradadas, generar maderas resistentes de primera categoría y absorber carbono, al tiempo que se rehabilitan y protegen zonas vulnerables y deterioradas de forma rentable y sustentable desde los ámbitos económico, social y medioambiental.
Vichada, el lugar en el que la sabana se convierte en selva, es el lugar donde sus comunidades dependen de la ganadería, la pesca, la agricultura y la minería. Hoy la región enfrenta amenazas como la expansión agroindustrial descontrolada, el conflicto armado y, últimamente, los incendios forestales debido a las altas temperaturas.
En las selvas, la explotación de flora y la tala ilegal han impactado negativamente en la biodiversidad y los ciclos hidrológicos, especialmente en la cuenca del Bita, una zona Ramsar de especial protección internacional.
Este proyecto de Inverbosques está certificado por Gold Standard y desarrollado por Forliance.
“El proyecto desde el que origina la emisión de esos bonos de carbono lleva más de 15 años generando impactos socioambientales importantes en la región y trabajando con y en pro de las comunidades de sus áreas de influencia capturando CO2 de la atmósfera. Generamos más de 250 empleos directos, 40% mano de obra femenina en el vivero. y 450 empleos indirectos a través de sus contratistas, convirtiéndose en uno de los principales generadores de empleo local“, dice Natalia Quevedo, CEO de inverBosques.
Gracias al uso del combustible sintético 100% renovable, los vehículos de competición del Astara Team, bautizados 02 Concept, tuvieron un balance cero de emisiones. De esta forma ha logrado combinar una mejora de su sostenibilidad equivalente con una mayor competitividad, finalizando el Dakar en el podio de la categoría de vehículos de dos ruedas motrices y en el Top15 en la general.
Para Óscar Fuertes, director deportivo del Astara Team, “desde que participamos en el Dakar hemos querido enfrentar el reto de conjugar deporte, movilidad y sostenibilidad, y superarnos especialmente en la mejora continua de la formulación del combustible. Este camino es apasionante porque la tecnología nos permite soñar, y, porqué no, tal vez ganar un Dakar con impacto cero“.
“Creemos que cada paso hacia adelante en el mundo de la movilidad debe estar acompañado por un compromiso firme con la conservación de nuestro entorno. Estamos sembrando las semillas del cambio hacia un futuro más sostenible. Queremos dejar un legado en cuanto a la huella que dejamos en la tierra“, afirma Andres Aguirre, Country Manager de Astara Colombia.
En 2022, las emisiones del Astara Team en el Dakar fueron compensadas con un proyecto de reforestación en la región Madre de Dios de la Amazonía peruana. En 2023, elegimos compensar nuestras emisiones con el proyecto de Puro Earth en Finlandia, a través de la empresa Ekovilla, que almacena carbono en materiales de construcción y promueve la economía circular y empleos verdes.
Vistazo al panorámico
La iniciativa en Vichada está enmarcada dentro de su estrategia de sostenibilidad, que tiene alcance en los 19 países en los que opera. En 2023, Astara se comprometió a lograr la neutralidad de carbono en sus operaciones antes de 2027, electrificando el 90% de su flota y usando el 100% de energía renovable en sus instalaciones. Además, están desarrollando un plan de compensación de carbono, destinando el 80% a proyectos de eliminación de CO2e.
Este movimiento disruptivo liderado por el Astara Team en el Dakar, carrera contra el tiempo y la naturaleza implacable, abre la posibilidad de una movilidad más limpia y, a través de proyectos socioambientales como Proyecto Vichada, de cuidar el planeta con el mismo fervor de la competencia.