Rusia negó en la ONU que haya deportado miles de niños ucranianos hacia su territorio desde que empezó la invasión de Ucrania, pese a las acusaciones de Kiev, de la justicia internacional y de varias oenegés.
El Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, que examina el caso en el marco de una reunión ordinaria, pidió el lunes a Rusia que responda a las “acusaciones de deportación”.
“Desde febrero de 2022, la Federación de Rusia no ha estado involucrada en la deportación de ciudadanos ucranianos a su territorio”, respondió el martes el jefe de la delegación rusa, Alexéi Vóvchenko, viceministro de Trabajo y Seguridad Social.
“Alrededor de tres millones de residentes de Ucrania, incluidos varios niños, fueron aceptados en la Federación Rusa. La mayoría de los niños vinieron con sus familias o tutores, fueron instalados en refugios temporales o con familiares”, explicó.
También indicó que se están realizando controles sobre la situación de “más de 5.000 niños”.
Rusia, que invadió Ucrania en febrero de 2022, reclama la anexión de cinco regiones ucranianas. Empezó con Crimea en 2014, seguida en 2022 por las regiones de Lugansk, Donetsk, Zaporiyia y Jersón.
Ucrania estima que hay 20.000 niños ucranianos que han sido enviados por la fuerza a Rusia. Solo alrededor de 400 han sido repatriados por las autoridades.
La Corte Penal Internacional emitió el año pasado órdenes de arresto contra el presidente ruso Vladimir Putin y la comisionada para los Derechos del Niño, María Lvova-Belova, por la “deportación” de miles de niños ucranianos.
Rusia rechaza firmemente estas acusaciones y afirma que “el reasentamiento de los niños evacuados se realiza sobre todo a petición suya y con su consentimiento”, según un documento que Rusia envió enviado al Comité de los Derechos del Niño el año pasado.
Yahoo Noticias Agencia AFP