Ser donante de órganos: un compromiso que trasciende en la vida

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Por Gilberto Mejía, líder del servicio de trasplantes de LaCardio

En Colombia, más de 4.000 personas esperan un trasplante para seguir viviendo. Detrás de cada nombre en esa lista hay una historia suspendida entre la esperanza y la incertidumbre.

En la Fundación Cardioinfantil – LaCardio, creemos que cada trasplante es una oportunidad de renacer y un acto de profundo amor que une a donantes, familias y equipos médicos en un propósito común: dar una segunda oportunidad de vida.

Desde hace 20 años, la Unidad de Trasplantes de LaCardio ha sido pionera en programas de alta complejidad en el país, realizando más de 2.000 procedimientos de corazón, hígado, riñón, pulmón y páncreas.

Su liderazgo se sustenta en la excelencia médica, la tecnología de punta y, sobre todo, en la convicción de que cada trasplante representa mucho más que una intervención quirúrgica: es un símbolo de esperanza, ciencia y humanidad.

El trasplante no es solo un procedimiento médico, es una oportunidad para reescribir la vida. Cada paciente que vuelve a sonreír después de una cirugía es testimonio del poder de la solidaridad y del compromiso de nuestros equipos por ofrecer medicina con propósito.

Historias que renacen

Las experiencias de quienes han recibido un órgano son la prueba viva de que donar es sembrar futuro, ejemplo de ello es Óscar Navarro, trasplantado de hígado hace tres años y recuerda su proceso como un renacer: “Hoy puedo ver crecer a mis hijos y disfrutar la vida con más tranquilidad, gracias a mi donante de órganos y al equipo de LaCardio, comprendí que cada día es un regalo que debo honrar”.

Por su parte, Trinidad Ruiz, trasplantada de hígado hace tres meses, vive su recuperación con gratitud y fortaleza: “Recibí una segunda oportunidad y la estoy aprovechando al máximo. No hay palabras para describir lo que significa volver a tener energía, volver a reír. LaCardio me devolvió la vida con amor y profesionalismo”.

Ciencia, excelencia y compromiso

El modelo de atención integral de LaCardio garantiza acompañamiento clínico, emocional y social antes, durante y después del trasplante. Detrás de cada caso, más de 100 profesionales trabajan en equipo —médicos, enfermeras, psicólogos, trabajadores sociales y especialistas en rehabilitación— para asegurar una recuperación segura y humana.

Creemos que donar órganos es un acto de trascendencia: permite que la vida siga su curso incluso después de la pérdida. Cada trasplante es una promesa cumplida, una historia que continúa latiendo gracias a la generosidad de quienes dicen “sí” a ser #DonatesPorNaturaleza y permitir que más historias se sigan reescribiendo.

Hagamos que la vida siga latiendo

Convertirse en donante de órganos es una decisión que puede salvar vidas. En Colombia, todos somos potenciales donantes, pero expresar esta voluntad a nuestras familias y dejarla registrada es el paso más importante para que se cumpla.

En la Fundación Cardioinfantil – LaCardio, seguimos comprometidos con brindar segundas oportunidades, acompañando con ciencia, experiencia y corazón a quienes más lo necesitan, por eso hacemos un llamado a la comunidad no solo a ser #DonantePorNaturaleza sino a dejarlo informado.