Teniente Coronel Jairo A. Álvarez: guerra le quitó pierna izquierda y una prótesis le devolvió ganas de vivir

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Foto: Joel González - Presidencia

El teniente coronel Jairo Alberto Álvarez Carvajal, del Arma de Artillería, actualmente se desempeña como Comandante del Batallón de Sanidad Soldado José María Hernández, en Bogotá. Su trayectoria en las Fuerzas Militares es un testimonio de dedicación y amor a la patria desde muy temprana edad en su natal Sevilla, Valle del Cauca.

“Desde niño sentí una profunda admiración por los militares. Mi familia no tenía antecedentes en las Fuerzas Militares, pero siempre me atrajo la idea de servir a mi país,” comenta el teniente coronel Álvarez. Tras culminar sus estudios decidió enlistarse y descubrir de primera mano la vida del soldado. “Al conocer el Ejército, entendí que esto era lo que quería para mi vida: ser un soldado al servicio de la patria.”

El camino no ha sido fácil. Como comandante de una compañía​ en el Batallón de Contraguerrillas 73, el coronel Álvarez enfrentó los peligros de la guerra en el norte del Caquetá. Durante una operación ofensiva en San Vicente del Caguán, fue víctima de un artefacto explosivo que le costó la pierna izquierda. “Uno nunca está preparado para algo así. Es un riesgo que asumimos como parte de nuestra profesión”, reflexiona.

Tras el accidente comenzó un arduo proceso de recuperación y revaluación de su carrera. “Me enfoqué en estudiar y prepararme, en ver la vida desde otra perspectiva. La rehabilitación fue un proceso largo, pero con el apoyo de mi familia y los especialistas del Hospital Militar logré adaptarme a una prótesis y retomar mi vida”, cuenta.

La primera prótesis, elaborada en 2009, marcó un hito en su recuperación. “Fue muy significativo volver a caminar, correr, bailar y montar en bicicleta”, recuerda. “La bicicleta ha sido una gran aliada en mi rehabilitación. Pedalear no solo me mantiene en forma, sino que me ayuda a proyectarme hacia el futuro y mantener una buena salud”.

A pesar de las dificultades, el coronel Álvarez nunca consideró retirarse. “Me he encomendado mucho a Dios y le he pedido que me guíe. Mientras la institución me permita, seguiré poniendo mis conocimientos y experiencia al servicio del país,” asegura con determinación. “La misión que se me ha encomendado siempre la he cumplido con dedicación”.

Ser comandante del Batallón de Sanidad le ha permitido ayudar a sus hombres de manera única. “Entiendo lo que viven los soldados en el campo de batalla porque yo también lo he vivido. Sé el dolor que sienten y la importancia de una mano amiga durante su recuperación,” expresa con empatía. “Mi objetivo es ser un modelo y referente, no solo para mi familia, sino para mis subalternos. Quiero que ellos vean que, a pesar de las adversidades, siempre hay nuevas oportunidades”, asegura.

El coronel Álvarez es un firme creyente en el poder de la familia y la fe. Casado y con una hija de 11 años, encuentra en ellas su mayor motivación. “Mi familia es mi soporte. Ellas me impulsan a cumplir mis tareas y a seguir adelante,” dice con orgullo.

En este 20 de julio, el mensaje del coronel Álvarez es claro. “Invito a todos los colombianos a poner la bandera en sus casas y a participar en la celebración de nuestra Independencia. Es un día para honrar a nuestra nación y reconocer el sacrificio de quienes, como yo, han dado todo por ella”.

El teniente coronel Jairo Alberto Álvarez Carvajal es un ejemplo viviente del heroísmo y la resiliencia que caracterizan a nuestros militares. En este día de Independencia, su historia nos recuerda el​ verdadero significado del sacrificio y el servicio a la patria.

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