La nueva Ley Laboral que se promueve desde el Gobierno del Cambio es una apuesta decidida por la dignidad del trabajo y por el cierre de brechas. Un ejemplo de ello es la transformación del contrato de aprendizaje del Sena.
Hoy, más de 67 mil aprendices en el Caribe tienen la posibilidad de contar con garantías laborales: reciben remuneración, están afiliados a seguridad social y tienen acceso a prestaciones legales
BARRANQUILLA (Atlántico), 1, ago.-/2025. – “El Caribe colombiano necesita más formación en áreas como turismo, logística, comercio exterior, energías renovables, ciencias de datos, inteligencia artificial, entre otros, y es necesario alinear lo que enseñamos con lo que el territorio y las dinámicas mundiales demandan”, enfatizó el ministro del Trabajo, Antonio Sanguino, durante su intervención en el XI Foro del Caribe colombiano.
En el panel ´Cobertura y calidad de la educación superior´ participaron representantes de la academia y del Gobierno y Sanguino estuvo junto con los rectores de la Universidad Simón Bolívar y de la Institución Universitaria de Barranquilla, José Eusebio Consuegra y Arcesio Castro, respectivamente, el director de la ESAP, Jorge Iván Bula, y el moderador Adaúlfo Calderón, director Territorial de la ESAP.
Durante su intervención, agradeció la oportunidad en este diálogo con un tema estratégico para el futuro de la región: el vínculo entre la educación superior y la creación de trabajo digno.
“El Gobierno de Gustavo Petro ha hecho un gran esfuerzo por incrementar la presencia de la educación pública superior en todas las regiones del país, y poco a poco se han ido extendiendo en los pequeños municipios. Necesitamos proyectos de educación superior pensados desde una perspectiva de la autonomía regional y territorial”.
Destacó los esfuerzos frente a este panorama, pues con la nueva Ley Laboral que se promueve desde el Gobierno del Cambio, es una apuesta decidida por la dignidad del trabajo y por el cierre de brechas.
Un ejemplo de ello es la transformación del contrato de aprendizaje del SENA, que ahora para los cerca de 70 mil aprendices en el Caribe, tienen la posibilidad de contar con garantías laborales: reciben remuneración, están afiliados a seguridad social y acceso a prestaciones legales. Ya no son mano de obra barata; son jóvenes en formación con derechos.
“Hemos ido más allá, pues por primera vez, los y las estudiantes de medicina que realizan su año de internado clínico serán reconocidos con un salario y seguridad social, gracias a una reforma que los valora como parte fundamental del sistema de salud y del mundo laboral. Esto representa una paz y una justicia laboral”.
El ministro Sanguino concluyó su intervención haciendo un llamado a una gran alianza entre el Estado, la educación pública y privada, y el sector productivo para afrontar los retos pendientes en materia laboral y educativa.
El titular de la cartera laboral también participó en el Congreso Nacional de Empleo Público, donde instó a los funcionarios a continuar trabajando para reducir desigualdades y avanzar hacia la justicia laboral.
Con información de Mintrabajo