A pesar de ser una etapa natural, aún existen tabúes alrededor de la menopausia, por eso, en el marco del Día Mundial de la Menopausia y el Trabajo, que se conmemora cada 7 de septiembre, es clave resaltar la importancia de establecer entornos laborales amigables con aquellas mujeres que experimentan esta condición, dada la afectación directa en su salud y calidad de vida, aun cuando los síntomas son leves.
Cuando los síntomas son molestos, como ocurre en aproximadamente el 50 % de las mujeres, la dificultad para hablar sobre sus problemas puede llevarlas a enfrentarlos solas, lo que resulta en aislamiento, culpa y ansiedad; afectando el entorno general de su vida, incluido el lugar de trabajo.
Investigaciones han demostrado que cerca del 50 % de las mujeres no buscan ayuda médica a pesar de presentar síntomas. Por otro lado, muchas mujeres han testificado que la incapacidad para hablar sobre estos problemas y buscar el apoyo de la sociedad puede tener un impacto negativo en sus carreras, vidas familiares y relaciones sociales.
Por ejemplo, si una mujer experimenta sofocos durante una reunión de trabajo o una fiesta familiar, su comportamiento podría cambiar sin que sea evidente; puede volverse irritable y tener dificultades para relacionarse con su entorno. Cuando las personas saben lo que está sucediendo, tienden a ser más comprensivas; de lo contrario, pueden percibir ese comportamiento como inusual o incluso grosero. Los síntomas de la menopausia no deberían generar vergüenza ni culpa; de hecho, pueden y deben ser controlados.
Los costos de la menopausia para la sociedad
La menopausia genera altos costos a la sociedad, asociados a la pérdida de productividad en el trabajo y al aumento de problemas de salud a largo plazo, como un mayor riesgo de osteoporosis, enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2 en etapas posteriores de la vida.
Una encuesta a más de 1.100 mujeres evidenció que el 94 % de las mujeres sentían que su trabajo se había visto impactado como resultado de los síntomas de la menopausia, y el 53 % dijo que sus colegas habían notado un deterioro en su desempeño. Las cifras también muestran que alrededor de un tercio de las mujeres experimentan depresión durante la menopausia, lo que sugiere que es necesario implementar medidas para apoyarlas en el entorno laboral.
En ese sentido, Abbott en alianza con la Asociación Colombiana de Menopausia (Asomenopausia) inició Menopausia en Positivo, un programa que abre espacios de discusión y concientización para empoderar a sus empleados en torno a esta condición de salud.
“Con el apoyo de nuestro equipo médico y de la mano de Asomenopausia, estamos felices de avanzar en la promoción de un ambiente más amigable, comprensivo y empoderador no solo para las personas que atraviesan la menopausia, sino para toda nuestra comunidad. Es un paso más en el proceso de desmitificar la menopausia y entenderla como una nueva etapa de evolución y madurez de la mujer”, afirmó Andrea Vélez, Gerente General de Abbott en Colombia.
“Cada día es una oportunidad para iniciar una conversación sobre la menopausia y asegurar que más mujeres obtengan la ayuda que necesitan durante esta desafiante etapa de la vida. Para nosotros es importante contar con aliados estratégicos que nos permitan continuar con la educación y promoción del manejo saludable de la menopausia, con un impacto directo en la vida de las personas”, afirmó la Dra. Janire Elisa Buelvas, presidenta de Asomenopausia.
¿Por qué hablar de ello?
Hablar sobre la menopausia es el primer paso para manejar la condición. Para ello, se recomienda buscar a un especialista en menopausia. Los ginecólogos, por ejemplo, suelen motivar a las mujeres a hablar libremente en la consulta médica sobre su condición. Asimismo, es recomendable hacer cambios en el estilo de vida, adherirse a una dieta saludable, realizar ejercicio físico y apoyarse en el círculo cercano.
“Hablar sobre la menopausia puede ser el primer paso para sentirse mejor y aprender a aceptar y abrazar esta nueva etapa de la vida”, añade la Dra. Marcela Pérez, directora médica de Abbott. “Una vez más, no hay nada de qué avergonzarse y no deberías tener absolutamente ninguna duda en hablar de ello. ¿Por qué debería darte vergüenza hablar de una etapa natural de la vida que impactará a todas las mujeres de la Tierra?”, concluye.
Finalmente, Abbott invita a las mujeres a consultar a su médico para hablar sobre la transición a la menopausia y lograr superar los tabúes que hay alrededor del tema.