Según las Secretarías de Hacienda, solo el 10 % de 100.000 contribuyentes contactados en 2024 pagó su deuda tributaria.
Bogotá, mayo de 2025: Cada vez más personas y empresas en Colombia se enteran de que están embargadas cuando ya no pueden mover su dinero.
Las autoridades fiscales y las Secretarías de Hacienda a nivel nacional, tienen la facultad legal de embargar cuentas bancarias mediante procesos de cobro coactivo, sin necesidad de una orden judicial.
En 2024, la deuda tributaria en Colombia superó los $7 billones, afectando a miles de contribuyentes en todo el país. La deuda general de cartera, que incluye impuestos como el predial, vehículos, industria y comercio, asciende a más de $13 billones. En noviembre de 2024, cerca de 100.000 contribuyentes fueron contactados por las Secretarías de Hacienda, pero solo el 10% pagó sus deudas.
‘’Es importante mantener actualizada la información en el RIT- RUT y revisar periódicamente el estado de cuenta en la Secretaría de Hacienda para evitar procesos coactivos. También se recomienda realizar derechos de petición preventivos y si existe deuda, lo mejor es solicitar una facilidad de pago cuanto antes. Contar con asesoría tributaria oportuna ayuda a prevenir problemas como embargos o sanciones’’, indicó Sara Valbuena Socia de Ventus Consultores.
En los últimos tres años, la autoridad tributaria colombiana ha mantenido un promedio de recaudo superior a los $180 billones anuales. Sin embargo, en 2025 se intensificaron las acciones de cobro, incluyendo embargos de cuentas bancarias y denuncias penales, con el objetivo de recuperar una cartera morosa cercana a los $1.2 billones de pesos. Este enfoque se concentra en más de 4.700 cuentas bancarias pertenecientes a 8.160 deudores morosos que, según las estimaciones, podrían verse afectadas por embargos en los próximos meses.
Y es que los embargos en las cuentas bancarias son especialmente negativos para las pymes, puesto que perjudica su liquidez y dificulta cumplir con los compromisos, las obligaciones de pago de las nóminas y la operación diaria. Al bloquear recursos primordiales no sólo termina afectando negativamente su situación financiera y economicista, sino también su reputación y viabilidad como negocio.
Ante esta situación, Sara Valbuena destaca que, ‘’la facilidad de pago es una alternativa para evitar procesos de cobro coactivo. Este mecanismo permite a los contribuyentes en mora pagar sus deudas en términos de meses o máximo 5 años, para lo cual se debe presentar solicitud formal ante la Secretaría de Hacienda, o el ente de recaudo. De hecho los requisitos fueron flexibilizados, y la cuota inicial que antes era del 30% ahora bajó al 10%. Adicionalmente para los contribuyentes que dejen el acuerdo a menos de 1 año, no van a requerir ningún tipo de garantía”
Por último, el futuro de cualquier empresa y su estabilidad financiera dependen de una adecuada gestión de su situación tributaria. No permitir que la desinformación o un descuido lleve a la inmovilización de sus recursos es clave para mantener el control. Es importante mantenerse informado, efectuar consultas periódicas y, de ser el caso, obtener asesoramiento especializado para evitar que una deuda pendiente termine afectando lo que tanto ha costado construir. La prevención es la mejor estrategia para asegurar la continuidad y el éxito futuro.